Descripción
Altura Máxima (con base): 12cm / Diámetro: 10cm / Grosor: 7mm
115,00 €
El nombre del Astrolabio proviene de la palabra griega Astro, que significa estrella, y de Labio, “el que busca”. Podríamos traducirlo por “el buscador de estrellas”. Sin embargo, este complejo instrumento tiene muchas otras aplicaciones.
Después de años de estudio e investigación el Dr. L.H.V. ha desarrollado este astrolabio basado en los clásicos. Su precisión y estética hacen de este instrumento, calculado para 50º de latitud, una pieza absolutamente única.
Altura Máxima (con base): 12cm / Diámetro: 10cm / Grosor: 7mm
Peso | 0,5 kg |
---|
No hay preguntas aún. Sé el primero en hacer una pregunta acerca de este producto.
Del griego “buscador de estrellas”, este instrumento fue introducido en Europa por los árabes. Se transformó en una herramienta de uso imprescindible para los astrónomos y astrólogos. Entre sus muchos usos se encuentran la ubicación de las posiciones de los astros, la determinación de la hora local, cálculo de la latitud geográfica, medidas de altura o azimuts.
Sustentado en años de estudio e investigación, el Dr. L.H.V. ha desarrollado este astrolabio basado en los clásicos. Su precisión y estética hacen de este instrumento, calculado para 40.4º de latitud, una pieza absolutamente única.
Reproducción de un catalejo de 4 tubos de metal envejecido y recubierto, en el tubo exterior, en cuero al uso de la época. El catalejo es un instrumento característico de la navegación que inició su andadura durante el siglo XVI, convirtiéndose en imprescindible rápidamente.
Se entrega en caja de “madera real” (obtenida del palisandro).
Aunque se le conoce como Anillo Astronómico (Annulus Astronomicus), el nombre completo de este instrumento utilizado para saber la hora solar y realizar otras mediciones astronómicas, es Anillo Equinoccial Universal. Su principio es el del Cuadrante Solar Ecuatorial de tipo universal.
Existieron varios tipos de anillos astronómicos, los de mayor tamaño podían señalar la hora al minuto y fueron por mucho tiempo la única manera de saber si los relojes mecánicos funcionaban adecuadamente, sin tener que recurrir a un observatorio astronómico. En esta versión de tamaño reducido la Latitud es fija (40,4º).
Alto: 130mm
Diámetro: 45mm
Grosor: 4mm
Hollywood miente. Es hora de decirlo a las claras. Las fuerzas de la naturaleza y el inmenso y oscuro mar, más que los piratas o los buques de las naciones con los que se mantenían conflictos, fueron los auténticos enemigos de los barcos cargados de tesoros que cubrían la Carrera de Indias, la extraordinaria ruta marítima que unía los territorios de la Monarquía hispánica a través del océano Atlántico.
El 1493 regresó a la Península la expedición capitaneada por Cristóbal Colón, que anunció el descubrimiento de nuevas islas hacia las Indias. La expansión española en ese nuevo mundo fue rápida. A finales del siglo XVI, transcurridos apenas cien años, las florecientes ciudades de México, Lima y Potosí, a la sombra de ricas minas de metales preciosos, tenían más habitantes que las más grandes de Europa.
Desde 1561 y hasta 1748, para llevar suministros a los colonos y luego llenar las bodegas de plata, oro y ricas mercancías de regreso a España, cruzaron los mares dos flotas anuales. Eran barcos del rey, llenos de riquezas de la Corona y de particulares, por lo que su pérdida era una cuestión de Estado. Lo cierto es que, pese a su número, durante dos siglos y medio, no se perdieron demasiados. Éste es el relato de su épico viaje.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.